El Museo Nacional de Arte, dependiente de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia, ha preparado para el mes de mayo, la exposición colectiva: EJTI – LEÓN – JUAN; muestra que reúne la pintura de Ejti Stih y las esculturas de León Saavedra Geuer y Juan Bustillos.
La misma dura hasta fines de mayo a partir de las 19:00 horas, y por el tamaño de la misma, será instalada tanto en las Salas Temporales y el Patio de Cristal de Museo Nacional de Arte, como también al aire libre, en la calle Comercio entre Socabaya y Yanacocha; y estará compuesta por las obras más recientes que se expresa en el trabajo artesanal que se devela en cada trazo, golpe o soldadura; ahí está la arquitectura secreta de sus sensibilidades que nos inducen a ver los diversos mundos que cada uno de los artistas expositores ha construido a lo largo de su vida.
Esta singular exposición ha sido pensada como una de las principales actividades, enmarcadas en la ya tradicional Larga Noche de Museos, que este año cumple su VI versión.
La muestra será a su vez subdividida en tres partes, la primera se denomina – EJTI, donde la artista a través de su obra manifiesta su preocupación por los constantes chaqueos y el humo que contaminan Santa Cruz, que la inspiraron para crear más de 20 obras de gran formato, en las que se aprecian paisajes orientales azotados por los incendios y la desolación que dejan a su paso, el blanco, el negro y el gris , que también aparecen en paisajes urbanos con ese manto perverso que puede interpretarse como la deshumanización de la ciudad.
Ejti Sthi, señala: “cuando uno anda por la ciudad o el campo, el sol no aparece, la lluvia no pasa y todo se ve como si tuviera un velo apocalíptico. El color se va”.
La segunda parte, LEÓN – nos permite apreciar las obras de León Saavedra Gueuer, quien proviene de una familia con una larga tradición en el arte del vitral, su escultura, es un referente primordial en la historia de la escultura contemporánea en Bolivia, su trabajo abre nuevas e importantes posibilidades a la forma, la búsqueda de transparencias, ritmos abiertos que se proyectan en el espacio y la liviandad de los volúmenes, son preocupaciones permanentes en la búsqueda formal del artista; mientras que la elección de los materiales, el manejo de las múltiples posibilidades del hierro, y la combinación con otros materiales como el vidrio; las pátinas y acabados ofrecen una rica expresión que brinda al público una experiencia sensorial única, motivando a la contemplación y al disfrute de la forma escultórica.
Por último – JUAN – que decidió dedicar su exposición a Malón, ese animal que acompaña a la humanidad desde los viejos tiempos hasta nuestros días; ese Toro o Buey, que en la antigüedad ha estado representado como símbolo de valor, virilidad, lucha, bravura y fecundidad. Amazonas, Europa, Toro-Bochi rumiando, Tor-Bochi rugiente y Mata Hambre, son la vanguardia de este Malón de toros que desde la colonia, con los toros criollos a nuestros días, con los toros cebuinos, en tropel de toros bramantes ayer y hoy, junto a los humanos en la paz, en la guerra y los mitos, acompaña en nuestros surcos de la siembre, en nuestras danzas y en nuestra mesa de cada día.
