Para enfrentar la Odisea seguimos el ejemplo de Penélope: tejer hilos diferentes para crear nuestra trama.
Una madeja de hilos la tomamos del mito de HOMERO: el viaje, la pérdida, la guerra, a ausencia, la pasión amorosa, la fidelidad, la lucha, el naufragio (simbólico y real), la familia, la búsqueda del padre, el sueño, la espera, el amor adolescente, la pérdida de los hijos, las ganancias debidas a la guerra, la búsqueda de la identidad, la invasión, la brutalidad, el asedio a la mujer, el abuso, la venganza, la guerra civil. Si alguien piensa que sean temas de otras épocas, debería solamente mirar a su alrededor y tratar de comprender las vicisitudes ocultas en la muchedumbre que cada día trata de entrar en el primer mundo en busca de derechos elementales que es han sido negados en sus países, y hoy también en la gris, triste y decepcionante tierra prometida.
De aquí parte la segunda madeja de nuestra búsqueda: Ulises es también el emigrante, los monstruos que encuentra son los monstruos con que se topan aquellos que parten en busca de un destino mejor. Antífates es el tren que devora a los miserables que trepados en su lomo, atraviesan Méjico para llegar a la frontera. Polifemo es el jefe de la mara "Salva trucha" que extorsiona, viola y asesina a los emigrantes, Caribdis son las aguas del golfo de Guatemala donde se ahogan aquellos que desde Colombia parten en barquitos hacia el norte. (En Europa, Caribdis está en Porto Palo en Sicilia, en Gibraltar, en las costas de la Apulia y la Calabria, en las aguas atlánticas de Cádiz, etc.) Escila son los perros guardianes de cualquier frontera, las sirenas y el Hades son el canto de casa, la nostalgia suprema.
La tercer madeja fue enfrentar estos paradigmas partiendo de nosotros mismos, de
nuestro presente. Qué significa para nsotros hoy, emigrar, volver, esperar, viajar, enfrentar monstruos, vengarse, abusar, buscar.
Detrás de la historia contada por Homero, detrás de las palabras de muchos de sus personajes, vibran respuestas, metáforas e imágenes que pertenecen a los jóvenes que construyeron este trabajo interrogando su propia diminuta pobre y escondida odisea.
La última madeja fue el presente de Bolivia, un país que cambia en modo dramático,
donde cada mes se arriesga el choque violento y a último momento se encuentra el
modo de evitarlo. Un país atravesado por fuertísimas tensiones, renacidas esperanzas y cambios radicales. La profecía de Tiresias no es la de Homero. Es una descripción de cómo vería hoy Bolivia un emigrante que regresara luego de veinte años. La agresión y humillación de Ulises por mano de los pretendientes tiene el tono y las palabras de las agresiones racistas que hoy ocurren en nuestro país. La Odisea de Homero termina con una guerra civil que Zeus y Atenea interrumpen. En nuestra Odisea no existe ningún Deus ex Machina. La guerra incumbe y cada uno debería hacer cuentas con lo que ella significa. Hubiera querido terminar este trabajo hace un año y medio, cuando lo comencé.
Las cosasque estaban en el aire están precipitando. El sueño de una sociedad diferente choca con una brutal oposición y con los errores de los que dirigen este momento. Todavía no sabemos cual será el resultado. También de este momento, capital para nuestro martirizado país, este trabajo es testimonio.
Cesar Brie