El Arte de la Fuga de Vadik Barrón

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Vadik Barrón es músico, pasó por el grupo "Camaleón" antes de consolidarse como solista, es autor de varios CDs , entre ellos "Astronauta",  "Minimalia" y "Ovni". Es además escritor, y tuvimos la oportunidad de publicar en Palabras Más, allá por el año 2003,  fragmentos de su primer poemario públicado "Cuaderno Rojo", mismos que Vadik leyó para nosotros y se pueden escuchar todavía  aquí. Ahora su nuevo trabajo "El Arte de la Fuga" le mereció el Premio Nacional de Poesía  Yolanda Bedregal, 2013. Ésta una muestra.
 
 
Noticiero
 
es para volverse loco
el secreto intersticio entre los días,
la piel agrietada de la memoria.
son un cruel juego de baraja
las posibilidades violentas de la velocidad,
de la genética familiar, de la intoxicación alimenticia.
 
el recordatorio de nuestra insignificancia
debiera ser edificante pero no lo es,
nadie quiere ser menos que dios
en esta carrera de galgos que es la vida adulta,
en este circo de fenómenos que son las sociedades
que se llenan la boca con democracia, tolerancia y pluralidad.
 
esa conciencia solo nos quema los cables,
nos provoca cortocircuitos en la imaginación,
nos inscribe en el libro guiness de la soledad.
por eso nos reímos de la desgracia ajena
por eso matamos por defender el color de una camiseta sudada
por eso adquirimos compulsivamente perfumes y bálsamos
que oculten el olor de nuestra muerte.
la inmolación pasó de moda,
ahora entramos todos voluntariamente y en rebaño
a la moledora de carne del futuro.
Ese rumor agudo que llega del cielo
son los aliens riéndose de nosotros.
 
 
 
mundo-in-mundo
 
pobrecita baby blue,
baby black, baby white: todos los modelos
de nenas mimadas de todos los colores y escandaletes,
las divas de alados afeites, de los dimes y diretes.
¿qué se siente ser objeto de una idolatría?
¿cuántos millones pagan tu soledad central?
bailar en la boca de la gente
es menos una metáfora hábil
que la comprensión última de la naturaleza zoológica del espectáculo.
pobre nena linda, piel de porcelana,
pestañas estalactitas, caderas de jarrón etrusco,
sonrisa plástica sostenida en el aire,
bellos pies mínimos asomando debajo de las galas estrambóticas
que los caprichosos llaman moda
y los ilusos visten maquinalmente.
la alfombra roja se alimenta de la sangre de los que no alcanzaron la fama.
a ti no podré invitarte a una salteña
o a una caminata por el parque.
pobre beldad rica, virgen de los ipads
condenada a la caridad sistémica,
a la conversión del plomo en oro.
pierde cuidado que nosotros
vamos a desearte para siempre
vamos a soñar con tu olimpo venenoso
vamos a guiñarnos los ojos groseramente
observando tu poster
en las tardes soporíferas de billar y cerveza.
con lo que nos queda de ilusión vamos a imaginar
tus veranos eternos
tus fragancias corpóreas.
y tú tal vez nos veas un día al fondo de las noticias,
como esos chicos que saltan detrás de los goleadores para salir en la tele.
en ese mundo inn:
sempiternos cetros y apostasías.
en este mundo-in-mundo:
pantallitas y luces de colores para hacernos a la idea de un alma.
juro que te querremos honestamente
aunque todos nosotros tomaremos una mujer
cuando caiga la tarde de la pubescencia.
tú proseguirás tu existencia pautada
sin asomar siquiera a los misteriosos deleites de la imperfección,
sin probar jamás las mieles del inconmensurable amor de los feos.
 
 
 
[1984]
                                                                             “…es apenas un péndulo vulgar”
                                                                              Nicolás Ortíz
te requerirá de pasiones,
proclamará la melancolía como único atributo del amor,
edulcorará el divorcio y el abandono con ornamentos propios de motel,
te lamerá las orejas con un bla bla meloso y obsceno.
 
tendrás que ser fuerte:
suspender tus jugos,
apagar las llamas que te devoran la insensatez.
 
con el fin del mundo a la vuelta de la esquina
no hay lugar a salvo para una cartucha como tú,
que no es ni maledicente ni maleducada ni nada
sino un obtuso papagayo conceptual.
 
que la noche no te irrigue los párpados,
no te dejes caer en tentación, líbrate del mal.
guárdate de las falacias seductoras
de la lengua zalamera de julio iglesias. 
 
 
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