Simples como un beso
metálicos como un trueno
Documentos de vacaciones
y primeros estados de ausencia
esqueletos de la memoria
en la espiral del recuerdo.
Nadie nos enseña
a subir un columpio
no existen maestrías del vaivén
ni políticas públicas de columpiadores
sólo buscamos con instinto el vértigo
y vivir el impulso del momento.
Hasta que un día
con la violencia de un réptil
pisamos la tierra
perdemos la inocencia.