Andrés Ronnw Klarlund dirige Strings que gira en torno al significado de las cuerdas que sostienen a las figuras de madera, dando vida a un mundo fantástico.
Los hilos se extienden hasta el cielo que es el lugar donde empiezan las manos de hábiles artistas
La animación muestra lo que usualmente se esconde instrumentalizando las cuerdas real y metafóricamente. De esta forma se da cuerpo a una obra hibrida que explora las capacidades expresivas del teatro de marionetas en conjunción con el lenguaje cinematográfico. En la realización de la película trabajaron los dedos de doscientos manipuladores y la realización se llevo a cabo durante dos años y medio
Humanizar los muñecos en la pantalla grande, significa volver al espectador marioneta de un mundo que representa las profundas necesidades humanas. También significa regresar al asombro del niño para jugar con los sentidos.
La experiencia del film nos interioriza en la mirada y en los movimientos difícilmente logrados en frágiles cuerpos de madera y nos transporta a la oscilación permanente de las cuerdas. El extrañamiento produce una nueva realidad de perspectivas y texturas. La ilusión nos permite contemplar la vida con otra perspectiva, encarnada en los objetos.
Los diálogos maravillosamente interpretados por la completitud de las voces intentan apoderarse de las figuras y logran el efecto de una comunicación telepática. Las cabezas talladas de grandes ojos que parpadean y bocas inmóviles sugieren esta sensación. Sin el protagonismo de la voz, la obra es impensable. El doblaje original está realizado por reconocidos actores: Derek Jacobi, Ian Hurt y Catherine McCormack.
La verosimilitud también esta dada por el movimiento de las cámaras y un montaje versátil. Así transcurren sin sorpresa ochenta ocho minutos de animación en una escenografía que instrumentaliza elementos como la luz y la música, el agua, la nieve y la arena, dando énfasis a las agitaciones de la historia sobre el hieratismo de las marionetas.
Strings esta llena de pequeñas sorpresas visuales y auditivas. Los personajes del reino de Hebalon saben que los hilos de la vida son los hilos de la tragedia. Saben que la vida pende de un hilo. Se nace cuando las cuerdas descienden sobre la madera infundiendo el espíritu con el soplo musical de un arpa. La vida es movimiento, la muerte, parálisis.
En esta historia clásica, la trascendencia del héroe que supera diferentes pruebas alude a la necesidad de trepar las propias cuerdas para subir una montaña o poder volar. La muerte permite liberarse finalmente de las amarras que caen del cielo. Una escena de amor entre dos muñecos se traduce en la tensión y la unión de sus cuerdas a la luz de la luna.
Así, llena de buenos sentimientos Strings divierte en más de una forma. Si le gustan las marionetas o se siente identificado con la manipulación, vea esta inusual propuesta cinematográfica.
Para leer más críticas de las películas que se exhiben en el 8vo festival de cine europeo, además de ver el programa completo, entra a: