LA SEDUCCIÓN DE LOS OBJETOS

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Deshabitado o el Empalago del ser   habla de la  saciedad y el espacio vacío. Si  una primera sala  muestra  el  solitario motivo de un  baúl  con  un vestido de papel,  la segunda  abre la  saturación donde  los sentidos despiertan a la naturaleza de los objetos.

La  sala vacía es un  punto de partida.  María Teresa señala  un  barroco donde se interactúa con el espacio y los elementos sembrados. Así surge la presencia viva del objeto. 

En el performance  de la inauguración,  con la participación  del grupo de teatro Katak; alguien recorría la galería lanzando trozos  de un  corazón de gelatina que también se  daba a probar  a los asistentes.

Sobre el  sutil acto de antropofagia  María Teresa dice: “La gelatina es un material que tiene vida, que asume una transparencia con la luz y que se mueve (…) Cuantas formas hay de decir sobre el corazón, emociones fuertes que  estrujan.  Comerse el corazón es como ofrecer algo de ti y la gente no siempre puede aceptarlo (…) comer el corazón es como tratar de comprenderse, de probarse, de entender quienes somos más intimamente".

El título  de la instalación fue  inspirado por un cartel  que aparece en Frágil, la obra del Teatro de los Andes, pero también  indica dos tiempos encontrados por la autora: “Deshabitado tiene que ver con mi condición respecto a la obra,  porque como yo he dejado de hacerla, y  he dejado el Teatro de los Andes,  este personaje esta vacío de mi o yo estoy vacía de él, de la obra y del grupo; y el Empalago del Ser, porque así como estoy buscando reflejar toda la gente que se ha visto  en esta obra,  a la vez estoy yo una y otra vez, y llega un momento en que uno se empalaga de sí mismo” .

En Deshabitado o el Empalago del Ser se exponen videos, uno  pertenece al presente y otro  al pasado. El video realizado  con la participación de Daniela Cajias y Gabriela Zamorano muestra la intención de multiplicar las Lucias, el personaje de Fragil, distintas personas de la calle en el Puente de las Américas arrastran el corazón.

Por otra parte el  video de la obra Frágil  se mira en el primer video y   ha sido transformado  por María Teresa, reeditado  con aceleraciones, repeticiones y tiempos lentos, marcando movimientos,  como indica Dal Pero  se mira la distancia en  un tiempo de ensueño  que ya no es un tiempo real, el tiempo en que realizó Fragil.

En esta instalación  objetos construidos intentan materializar metáforas.  Los  sencillos materiales son detonantes, suscitadores evocando sensaciones que salieron del personaje Lucia, pero que también se desprenden de Frágil para construir un mundo propio. Contemplarse en el silencio, la serenidad o la intranquilidad de los nuevos seres, hace florecer una obra autónoma.

Un plato vacío y comida desparramada en la mesa, un vestido que cuelga en la silla, metonimia de un ser, son impresiones que convocan o se desvanecen para la mirada.  El visitante deja de ser espectador  colocando  su propia huella al hundir la mano en la masa gelatinosa o sacarse una fotografía detrás del  vestido de papel decapitado.

Si lo desea puede  también subrayar las palabras que más le  gusten en el texto de la obra Frágil  que pende de un hilo suspendido junto a un libro gemelo que ha sido subrayado previamente por la artista, las palabras subrayadas desplazan nuevos diálogos.

La infancia gravita en   Deshabitado o el Empalago del Ser.  El papel,  envoltura del cuerpo que se deshace y se confecciona alude a la fragilidad. Las formas descriptivas del corazón, o los recortes de papel sobre la pared como vestidos de muñeca intentan explorar esta sensación: "El vestido de papel sin encasillarlo solo en esta respuesta, es como el emblema de todos los vestidos o de todas las máscaras y de cómo uno al romperlo busca descubrirse a si mismo y a los demás"

El baúl es una presencia  que retomada del teatro se devuelve con otros significados: "El baúl vacío tiene que ver  renovarse y cortar con algo  que te ayuda a sobrevivir pero también te aísla del resto, se refiere a  cortar amarras incluso contigo misma y salir para  renovarse.  Frágil está inspirada en  una novela de los años treinta  Vida y muerte de una ama de casa, la autora  italiana  Paula Masino,  cuenta la historia de una niñita que se encierra y vive su infancia en un baúl”.

El vestido de papel marca el lugar de una poética, se lo deshace y  reconstruye. La  infancia  toma forma en el vestido de niña, sobre  este punto Dal Pero comenta: “Es azaroso tratar de  dar  explicaciones, el papel representa fragilidad, una infancia que llevas encima que se deshace y la puedes rearmar (…) “Esos infiernos y paraísos familiares, inquietudes internas a las que no siempre le puedes dar un nombre,  cosas  a la vez efímeras “

Cinco años despues de Fragíl Dal Pero explora  sus propias afinidades con los objetos y nos ofrece imágenes transformadas, una instalación con vida propia donde el visitante es libre de seguir  el llamado de los objetos  a:  deja algo aqui, pon tu mano aqui, tócame,  cómeme, arrastra el corazón, sácate una foto, mírame.   

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Acerca del autor

Escritora y periodista cultural. Licenciada en Literatura. Ha publicado el poemario “Fragmentos en el Aire” Ed. Gente Común. Relatos en las compilaciones “Algo por el Estilo” (Marcelo Villena, UMSA), “Memoria de lo que vendrá”,(Juan González, Nuevo Milenio), en “Más de cien escritores bolivianos” (Roberto Agreda Maldonado Ed. Kipus), en la Antología Primer Festival Internacional de Poesía José María Heredia, Toluca 2017 y la Antología XXII Enero en la Palabra. En medios como Los Tiempos, La Razón, El Diario, Opinión, Revista “Tu mundo”, Revista Municipal de Culturas “khana”, Revista de poesía “Alforja” y Cuadernos de Literatura “Pensamiento Decolonial y Literatura”. Como crítica de cine, ha publicado junto a Marcelo Reyes “Apuntes de Cine” Ed. 3600. Desde 2002 hasta la fecha es editora de la revista digital de arte y cultura, Palabras Más, de la que es cofundadora.

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